El diario plural del Zulia

Puente sobre el Lago colapsaría si no se construye el Nigale

Hablar del Puente “General Rafael Urdaneta” es hablar de 54 años de historia. Pensar en estructura, en rodillos y placas pretensadas de cemento. Para 1962, año donde fue culminado, era el segundo puente más largo hecho en concreto. Fueron muchas las manos -dos mil 600 en total-. Entre ellas las de Óscar Benedetti.

Todavía con la memoria intacta. Todavía con la emoción del primer día. Todavía con la misma entereza que lo llevó a viajar por toda Europa para buscar financiamiento y darle vida al proyecto de su vida, Benedetti continúa dando cátedra. Tiene 90 años y ayer -como siempre- estuvo presente en la celebración de la Semana del Puente Sobre el Lago.

El corte de cinta se hizo desde Punta Iguana el 24 de agosto. 100 mil personas contemplaban atónitos la infraestructura, no podían creer que la Costa Oriental del Lago fuera conectada con la Costa Occidental a través de ocho mil 678 metros de longitud y no de la acostumbrada ruta ferroviaria. Rómulo Betancourt era el presidente de Venezuela. Llegó al Aeropuerto Grano de Oro a las 4:00 de la tarde. Se paralizó el Zulia.

Benedetti pertenecía a la empresa Precomprimido C.A. que originalmente era de un grupo italiano, cuyo asesor técnico era un profesor romano llamado Riccardo Morandi. Luego se la compraron. Hicieron el primer puente pretensado. El carupanero viajó, recorrió el mundo para tener ese resultado. Compró maquinarias, solicitó créditos y junto al estado, bajo la dictadura de Marcos Pérez Jiménez inició el Coloso, en octubre de 1957.

“Con la caída de Jiménez llegó Wolfang Larrazábal y él decía que ese puente iba a salir muy caro”. Al montarse el Flaco Sanabria –refi riéndose a Édgar Sanabria quien asumió la silla presidencial después de Larrazábal Benedetti continuó con el trabajo. El mandatario le dio el permiso, gestión que culminó Betancourt.

El proyectista no fue invitado al acto inaugural, sonríe cuando lo cuenta. Sin embargo, él y un grupo de trabajadores cuando se enteraron que iba el presidente, caminaron de punta a punta la obra maestra, para ser los primeros en pisar el Puente.

A futuro

Toda la historia la fue contando Benedetti. Desde el otro lado de una sala de La Estancia estaba el ingeniero Francisco Urbina, quien toma el micrófono para proseguir con el conversatorio “Construcción y Vigencia del Puente”, también se trataba de la visión a futuro, del Puente Nigale, donde Francisco está al frente hace cinco años.

En 17 % va su desarrollo. “Es lento”, dice Francisco. Estima que si el Gobierno central pone el esfuerzo y baja todos los recursos, en tres años podría estar listo. Podrían observar sus 11.8 metros de longitud y sus 42 kilómetros de vialidad complementaria, con un gálibo de 50 metros, cinco más que el Puente Sobre el Lago.

La preocupación del ingeniero es que el “pretensado”, como a ratos lo llama Benedetti, fue construido para un fluido diario de 45 mil vehículos y actualmente pasan 60 mil.

“Tenemos que tener listo el Nigale antes del 2029, porque según el censo en Maracaibo tenemos un millón 459 mil 448 personas y para ese año estaría en un millón 977 mil 899”, es el mismo Francisco quien también recuerda que el segundo Puente Sobre el Lago está siendo construido en Santa Cruz de Mara para que las personas del norte -que es hacia donde más ha crecido Maracaibo- se vean favorecidas de no tener que atravesar toda la ciudad para llegar a la Costa Oriental del Lago.

En la cita también estaba el general Ramón Yépez Castro, director del Puente Rafael Urdaneta. Celebró el cumpleaños de la inauguración del proyecto, y habló de la responsabilidad que ha tenido al frente la gerencia.

“Esperemos que el Puente Nigale esté construido pronto porque va a complementar la carga que tiene el Urdaneta”. Yépez Castro habló de una aplicación de tecnología de punta para controlar el paso de vehículos livianos y pesados. Dice que continúan con los planes de mantenimientos menores para darle más vigencia al Coloso.

 

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