El diario plural del Zulia

Profesores jubilados “salvan” los cursos desiertos de LUZ

La deserción estudiantil se acerca al 50 %, mientras las renuncias de profesores evidencian una disminución significativa del número de responsables académicos

Terminan las clases en la Facultad de Humanidades en la Universidad del Zulia (LUZ) y los pasillos están desiertos. Aún quedan algunos estudiantes esperando sus notas, entregando trabajos o socializando con profesores y compañeros de clase.

Desde el 31 de enero de este año el Consejo Universitario decretó el inicio de un horario de contingencia en toda la institución por el estado en que se encontraba la universidad, tras  la renuncia de 200 profesores en el último trimestre de 2017, según la Asociación Sindical de Empleados de la Universidad del Zulia (Asdeluz).

Otra de las razones para la flexibilización en los horarios fue el deterioro de las unidades de transportes estudiantil y la soledad en la que quedaban las facultades después de las 2.00 de la tarde.

Actualmente, la deserción estudiantil se acerca al 50 %, mientras las renuncias de profesores evidencian una disminución significativa del número de responsables académicos. “Había unos 12.000 estudiantes en esta facultad, cuando está acondicionada para 5.000, hoy apenas llegamos a los 6.000”, explica Doris Salas, decana de la Facultad de Humanidades y Educación.

A esto, Salas agrega que de 595 profesores se ha ido al menos el 30 %, lo que equivale a un estimado de 178. Detalla que además de renuncias se presentan casos de permisos sin retorno y ubica a la Escuela de Comunicación Social como una de las más afectadas.

 Lo que sí tenemos es un contingente numeroso de profesores jubilados que nos colaboran con varias materias”, asegura Salas sin precisar la cantidad.

 

Otras facultades

En la Facultad de Ciencias Políticas y Jurídicas se aprecia un diagnóstico no menos desolador. Este 31 de julio, durante las inscripciones, al menos 30 estudiantes esperan por su turno para que les agreguen las materias que van  a cursar en su próximo año. La Directora de la Escuela realiza este proceso.

Una empleada explica que de los nuevos ingresos, al menos 25 % presentó su renuncia o se fue de permiso “y no regresa”.  Esto suma ausencias de docentes y eleva los cargos, así como los cursos desiertos a un aproximado de 60%.

Sin embargo, Rosa Razz, profesora de pregrado y postgrado de la Facultad de Agronomía describe que los nuevos ingresos tienen credenciales que demuestran su capacidad.

Razz describe esto con el relevo de su puesto: “El profesor que vendrá a suceder mi cargo tiene ocho años de experiencia tanto en trabajos de investigación como en el campo de trabajo”.

Contrasta que el mayor número de profesores que se retiró es de jubilados, mientras que de nuevos ingresos “sí se han ido, pero no de manera masiva”. Esto se debe a que “el grupo (de docentes) que entró conmigo, 28 o 30, ya están de salida”.

Ana Colina, directora de la escuela de Agronomía, precisa que tienen 72 profesores de los cuales tres renunciaron, dos se retiraron con permiso y una está de año sabático “y confirmó que regresará”.

Concursos desiertos

Sobre los concursos académicos, Colina declara que abrieron 38 de los cuales 28 quedaron desiertos, y para los que sí hubo concursantes, solo llegó un aspirante por materia.

En Humanidades, Salas expone que se abrieron 20 concursos y 6 quedaron sin aspirantes. “Bibliotecología, por ejemplo, que siempre ha sido una escuela pequeña, solo tuvo un concursante en una materia”, explica.

Mientras, en la escuela de Educación solo hubo un concurso desierto y en la escuela de Filosofía no ha habido fuga. A juicio de Salas porque “todos los profesores de allí son oficialistas”.

Tanto Razz como Colina consideran que posiblemente la razón por la que no hay aspirantes es por los sueldos poco atractivos”.

En el Rectorado una fuente explica que hay tanto concursos como renuncias en todas las facultades, pero no especificó datos concretos. Sin embargo, se estima que la población de docentes se ubicaba en 6.000 en los tres últimos años y se ha ido 30 %, aproximadamente.

Es decir, casi 2.000 profesores universitarios de toda LUZ renunciaron a sus cargos. Los jubilados son quienes, colaboran con algunos de los cursos desiertos. Y en varias facultades la deserción alcanza el 50% de la matrícula.

Lea también
Comentarios
Cargando...