El ocultismo en la moneda nacional

I : Los billetes

El Negro Primero, luchador independentista, es el jefe supremo de la corte negra africana y, además, es la imagen del billete de cinco bolívares.

La figura que aparece en los billetes de diez es el Indio Guaicaipuro, quien representa a la corte India.

Más que significar a Luisa Cáceres de Arismendi, la mujer oreada del billete de 20 es María Lionza, diosa de la montaña de Sorte, que ostenta una corte espiritual propia.

Simón Bolívar, gura emblema del billete de más alta denominación en Venezuela, pertenece a la corte de libertadores.

Este paralelismo de personajes históricos criollos con las tres potencias de la religión yoruba, constituye toda una construcción espiritual que responde a las raíces santeras de Hugo Chávez y a supuestos pactos con deidades, entre esas, Elegua.

Una gura humana al extremo derecho del billete de cien simula ser Elegua. Ojos que miran a la izquierda, con malicia; boca que sonríe con perversidad, frente adornada por un cintillo, cuello enroscado por un collar que en las tribus africanas se usa para alargar el cuello. Como arlequín.

II: La santería y el animismo

—En la cárcel, Chávez se la pasaba jugando a la ouija. Después comenzaron a hacer las sesiones de espiritismo (…) Los propósitos de esas sesiones era convocar a los espíritus libertadores y revolucionarios del pasado, para que supuestamente los guiaran (…) Algunos no creímos nada de eso, pero otros otorgaban total credibilidad a las palabras de los espíritus, que bajaban y hablaban a través de Chávez—. Entrevista con Yoel Acosta Chirinos, compañero de celda de Chávez.

El fragmento antes reproducido se lee completo en el capítulo 7 del libro Los brujos de Chávez, del periodista venezolano David Placer.

Desde los tiempos de la “conspiración”, a inicios de los ochenta, Chávez gustaba de los espíritus y adivinos. Tenía una bruja de con anza, Cristina, a la que siempre consultaba antes de hacer algún viaje o asistir a reuniones importantes. Durante su tiempo en la cárcel, después del golpe de Estado —en 1992—, hablaba con Bolívar y su ancestro, Maisanta.

Elio Peña; pastor de la iglesia Betel, Eduardo Ortigoza; sacerdote católico, y un seguidor de la religión santera que pre rió llamarse Carlos, han visto los billetes.

—¿Qué ve en el de cien?

—Algunos dicen que es un niño (…) Nosotros tenemos varios años dedicados al estudio de la cultura yoruba, afrocubana, que tristemente penetró en nuestro país (…) entendemos que hay libertad de culto, pero la Biblia es clara: solo adorarás a un Dios único— aporta Peña.

—La forma en la que se concibió el billete, tipo busto vertical, habla sobre que fueron pactados. Considero que esa es la razón por la que el bolívar está por debajo— añade el pastor.

—¿Cómo entra lo yoruba en un Estado cristiano?

—Data desde 1992, desde que comenzó en ellos esa pasión por la doctrina revolucionaria socialista. Es imposible divorciar la doctrina socialista de la religión, cuyo líder en Hispanoamérica fue Fidel Castro. El expresidente y sus seguidores más cercanos abrazan esa doctrina— complementa Peña.

Y terminaron enredados. El diálogo que sostuvo David Placer con Ramón Barrios, exvicepresidente de Operaciones de Aeropostal —reproducido en el capítulo 9 de Los brujos de Chávez— da cuenta de los santeros alrededor del expresidente:

—Cuando Chávez llegó al poder, aumentaron las relaciones con Cuba y la línea aérea tuvo que inaugurar dos vuelos a La Habana. Los militares me pedían que les regalara pasajes. Yo pensaba que eran viajes de trabajo, pero (…) iban a hacerse el santo, es decir, se iban a iniciar en la santería.

Los primeros meses de su gobierno le significaron sus primeros encuentros con santeros cubanos. El libro narra que, un santero cubano, Carlos Valdés, presenció la ceremonia que consagró a Chávez dentro de la santería en Cojimar, a siete kilómetros de La Habana. Durante el ritual, vio a Chávez hacer sacrificios animales para los orishas. Asegura además que a Chávez lo iniciaron en la rama de la palería.

Eso explica por qué la exhumación de los restos del Libertador en 2010. Para Eduardo Ortigoza, solo algo está claro: “Solo amarás a Dios por sobre todas las cosas”.

—El acto de creer en algo distinto es intelectual, emotivo y religioso. ¿Quién es el Indio Guaicaipuro para mí? Un personaje de la historia (…) Pretenden debilitar la cultura occidental, que es una cultura cristiano-católica, al introducir imágenes demoníacas o rasgos desconocidos en nuestros billetes— explica Ortigoza.

—La figura del billete de cien es Elegua— afirma el santero que prefirió llamarse Carlos.

Elegua es una deidad yoruba que es dueña del destino y de los caminos, los abre y los cierra, y se mueve entre el bien y el mal. Es capaz de ser muy bueno, pero también malo. Carlos aclaró que para que la economía de Venezuela esté en crisis, algo pendiente debió de haber dejado Chávez con la deidad o, en su defecto, con el espíritu del Libertador.

Mientras, la explicación oficial se centra en que la gura es la empuñadura de la espada de Bolívar.

III: Lo animista

Las toninas del Parque Nacional Médanos de Coro. Los cachicamos gigantes de Los Llanos. Los cardenalitos del Parque Nacional El Ávila. El águila arpía del Parque Nacional Canaima. El oso frontino del Parque Nacional Sierra Nevada. Las tortugas carey del Archipiélago de Los Roques.

Fauna y ora adornan los billetes de 2, 5, 10, 20, 50 y 100 bolívares.

Para el sociólogo Miguel Ángel Campos, está claro el animismo de este gobierno socialista.

—La tendencia por la naturaleza nacional, el universo tangible, los animales y plantas como una geografía…eso es muy importante en el discurso de la izquierda latinoamericana: la apelación constante a lo local, lo regional, frente al mundo planetario, el imperialismo y el capitalismo. El fervor hacia el animismo, en el que la geografía y el cosmos lo arropan todo, es africano— explica.

El animismo es una creencia religiosa que atribuye a todos los seres, objetos y fenómenos de la naturaleza un alma o principio vital.

—Se centra en relaciones escatológicas ocultas entre el actor del poder —dictador, presidente— y esas fuerzas.

—¿Animismo usado para generar efectos emocionales?

—Chávez apeló al animismo, a la brujería, para retener el poder— no duda en asegurar Campos.

El pastor Elio Peña confía en que una nueva etapa de renovación iniciará en Venezuela a partir de junio de 2017. Es cuando acabará el maleficio que el mismo Chávez desató sobre la nación, al maldecir al estado de Israel en junio de 2010, reitera.

—La Biblia dice que se bendecirá a quien bendiga y se maldecirá al que maldiga— reafirma.

Desde entonces, han transcurrido siete años duros para la nación. Lo que sucedió es conocido por todos: Chávez muere y recrudece la miseria. Ahora, la atención reside en las imágenes que tendrán los seis nuevos billetes que entrarán en circulación el 15 de diciembe.