Choferes particulares “cazan” efectivo en Maracaibo
Ante el déficit del transporte público y la escasez de dinero en efectivo, los marabinos con carros particulares, aprovechan un tiempo antes de llegar al trabajo y otro al terminar su jornada laboral para adquirir el “sencillo”.
Rosa Martínez es maestra. A las 7:00 de la mañana recorre la Circunvalación 1, en su Malibú, en busca de pasajeros. No lleva cartel, solo hace una seña con las manos para indicar que está prestando el servicio de transporte.
Antes de impartir sus clases de primaria en una escuela privada, “caza” billetes para realizar sus diligencias diarias.
“No es mucho lo que hago, porque es solo durante el viaje de ida y vuelta, pero resuelvo algo”, asegura.
Antonio Blanco maneja un Corsa plateado. Por las mañanas, en su trayecto al trabajo, por la autopista 1 monta a algunos pasajeros. Se cuida de las personas que monta. Observa su aspecto primero.
“Solo llevo a los trabajadores que llevan vianda o a universitarios”.
Blanco necesita dinero en efectivo para sacar unas copias y realizar trámites. Esta es la forma más fácil “porque los pasajeros siempre tienen”.
La flota de unidades registradas del transporte público tiene un déficit del 80 % de carritos,buses y microbuses.
Retirar billetes en las entidades bancarias es muy complicado actualmente por falta de liquidez, según el conductor particular.
“Siempre hay mucha gente esperando en las taquillas. Pre ero ahorrarme los disgustos en las colas y tomar esta medida rápida”, comentó.
Peligro latente
Esta modalidad de traslado genera desconfianza tanto en los usuarios, que se ven en la necesidad de agarrar cualquier unidad para llegar a su destino, como en los mismos choferes.
“Ayer esperaba un carrito para llegar a La Fusta y un chofer me hizo señas. Me dijo que iba hacia La Limpia. Dudé en montarme porque no tenía cartel de ninguna línea, pero me subí porque tenía clases”, relató Diana Espinoza, estudiante de Enfermería.
A pesar de que los conductores también temen por su seguridad, la falta del efectivo los obliga a tomar el riesgo de recoger desconocidos en la vía. Aseguran que cobran la tarifa de pasajes establecida —1.200 corto y 1.600 largo—.
